La magia de las velas es una magia de luz y transformación. Encender una vela es permitir que su interior se conecte con la Luz del Universo y aceptar la transformación en su vida.

Las velas naranjas están relacionadas directamente con la alegría de la vida, la felicidad, el calor del Sol, la fuerza, el buen humor y la vivacidad. Se utilizan para atraer estas energías a nuestra vida y conjurar la buena suerte. Sirven para superar depresiones, estados profundos de tristeza o melancolía. Se recomiendan en caso de rupturas sentimentales o pérdida de seres queridos. Combinadas con moradas y rosas nos ayudan a superar fracasos emocionales y a sanar el corazón.

También nos ayuda a ser más flexibles y a abandonar el control (sobre todo cuando estamos muy estresados). Confiar en la vida y en el destino es el mensaje de la vela naranja. Las personas que viven en su pasado (nombrándolo mucho en sus conversaciones) han de soltar peso emocional y las velas naranjas son su gran ayuda. Encender velas naranjas en casa nos ayuda a recuperar la confianza en el destino y en uno mismo. Nos recuerdan que debemos estar alegres y felices.

En la magia cósmica están relacionadas con el Sol y sus bendiciones, por eso se prenden en los Rituales Solares de Yule y Litha. Combinadas con velas verdes y negras atraen el dinero, la prosperidad y fortuna. Para potenciar su efecto puede escribir su petición en ellas (marcándolo en la cera) y ungir la cera con un aceite mágico. Esto potencia su efecto y la dirige hacia su objetivo. Otra forma de usar las velas consiste en ungirlas con aceite y rebozarlas en hierbas acordes a su petición. De este modo su poder se multiplica.